Algunas personas conocen un sentido de traición, especialmente perciben amargamente la traición de un ser querido. Este es un vicio de una persona frívola, incapaz de cumplir sus promesas y ser fiel a su elección. Independientemente de las circunstancias, la traición siempre se convierte en una experiencia amarga que nunca quiero recordar de nuevo. Sin embargo, tal experiencia ayuda a moderar el carácter, a hacerse más firme en el camino del fracaso y también a conocer mejor a las personas.
Los escritores han abordado este tema muchas veces, experimentando intensamente la amargura de la experiencia con sus héroes. En la obra de L. Tolstoi, "Anna Karenina", queda claro que el autor condena en parte a la mujer por traición a su esposo, y en parte todavía simpatiza con ella. Después de todo, para ella era una verdadera tortura: vivir por un tiempo en traición, engañando a su esposo, traicionando a su hijo. Fue su amarga experiencia, de la que no solo dos sufrieron. Vronsky, quien se apoderó de la pasión, el esposo de Karenina, que había experimentado toda la paleta de sentimientos, al enterarse de que su esposa lo había engañado, la propia Anna, que estaba atormentada por el remordimiento, su pequeño hijo. Y como resultado de una situación tan terrible: el suicidio de Anna, que no podía vivir bajo la constante mirada despectiva de la sociedad. Ella no pudo resistir la carga de su experiencia. Su esposo no se vio menos afectado: Karenin se aisló en sí mismo y ya no pudo encontrar la fuerza para confiar en las personas.
Pero hay otro tipo de traición: amigable, cuando un amigo se traiciona. Y no se sabe cuál de estos es peor. Describe muy agudamente la debilidad momentánea de su héroe A. Pushkin en Eugene Onegin. Desde el principio, nos muestra la amistad de Lensky y Onegin, como una especie de confrontación de intereses, pero esto es lo que se convierte en el obstáculo en su amistad. Onegin, queriendo darle una lección a Lensky, coquetea con su amada, lo que lo provoca a un duelo, donde mata a su desafortunado amigo. La traición del héroe consistió en la incapacidad de superar su egoísmo. Valoraba su reputación en la sociedad más que el compañerismo y la vida del joven Vladimir. La amargura de esta experiencia no le permitió a Eugene vivir en paz: vagó por los países, pero no pudo encontrar su lugar en el mundo después de lo que hizo.
La traición siempre va acompañada de dolor experimentado por ambas partes. Una persona que se engañó a sí misma oa los demás nunca volverá a tener confianza, es débil en su alma, incapaz de adherirse al camino elegido por él mismo. Ya es difícil para aquellos que han sufrido engaños y humillaciones confiar en las personas. Pero una experiencia tan amarga te enseña a ser más cuidadoso con tus acciones y promesas. Sabiendo cómo se siente experimentar ese sentimiento, nunca podrás hacerle esto a otra persona.